Nhis la’ay ya’a
Mezcal de las Montañas o como lo dicen en
Zapoteco: “El Agua Bendita de la Montaña”
Nuestro método
¿Cómo hacemos nuestro mezcal para que sea
auténtico de las montañas?
Origen
Santa María Albarradas es un mágico pueblo zapoteco en las montañas de Oaxaca, México. El mezcal que se elabora aquí hace honor a su gente y a sus tradiciones, a su cultura y a su espíritu a través de un proceso de cultivo y elaboración totalmente artesanal.
Ágaves
Los agaves crecen y maduran de forma natural en las laderas de las montañas, a más de 1700 metros de altura, donde un suelo compuesto por una mezcla de arcilla roja, gris y negra junto con un microclima único nutren su crecimiento. Este proceso orgánico crea la concentración perfecta de azúcares naturales y minerales que dan a nuestros mezcales características de elegancia, equilibrio y profundidad.
Cosecha y jima
Nuestros compañeros artesanos de la familia Martinez Perez seleccionan cuidadosamente las plantas de agave con la maduración natural ideal. A continuación, jiman las piñas o corazones (separan las hojas del agave para dejar el corazón limpio) utilizando una técnica heredada de sus antepasados, que deja un pequeño trozo de la raíz de las hojas en el corazón de la planta. Esto da como resultado un sabor único a nuestro producto final.
Horneado
Las piñas de agave se llevan a nuestro palenque en la cima de la montaña, donde utilizamos una técnica de cocción única que incluye colocar el agave en hornos de piedra volcánica con leña y cubrirlo con mallas de palma tejidas a mano por las mujeres del pueblo. Estas mallas son naturalmente porosas, lo que permite que el exceso de humo salga para producir notas ahumadas sutiles y refinadas.
Molienda y
fermentación
Al terminar la cocción de los agaves durante seis días, luego los trasladamos a nuestro pozo redondo de piedra con tahona tradicional tirada por caballo, donde se muelen durante varias horas hasta convertirlos en pulpa.
A partir de ahí, pasamos la pulpa a nuestras tinas de madera de pino y añadimos nuestra agua de manantial. La dejamos 6 días para que la fermentación natural actúe libremente y pueda absorber los aromas naturales de la sierra.
Destilación
Destilamos dos veces en nuestro tradicional alambique árabe de cobre, el resultado es un mezcal único con aromas y sabores realmente suaves, frescos y herbáceos.